Qué tiene en común lo chileno con la música gitana? Esa es la principal consulta que se me aparecía (más allá del recuerdo de Romané) al escuchar el segundo trabajo de estudio de La Mano Ajena. La respuesta? Me parece encontrarla en el track 6 “Cumbia Klezmer”, la canción donde se justifica esta fusión. Un sonido extraído desde los Balcanes que se combina con el segundo baile nacional.
“Radio Galena” nace como un disco conceptual dedicado a revivir la tradición de las emisoras antiguas. 31 tracks componen el álbum, que incluye locuciones a cargo de Alodia Corral y Gustavo Sáez, entremezclados con sintonizaciones, concursos, jingles, la hora y más que van dando forma a este juego. Justo en un momento en que está de moda el renacer de los singles y la generación del mp3, este conjunto se la juega por hacer un álbum distinto.
En medio de ese panorama las canciones de La Mano Ajena van apareciendo con el transcurrir de los minutos. Temas que tienen un vasto componente instrumental, el conjunto juega con la variedad de instrumentos y detalles utilizados en cada track generando buenas sensaciones. Es el reflejo de una muy buena labor de producción y arreglos utilizados en el álbum. Que se nota en los temas instrumentales (que tiene bastantes) como “Humpampa”, “Tango para Orianita” (con una fuerta influencia de Piazzolla) y “Vals de la Boda Pobre”. Para dar muestra de esta diversidad sonora se utilizan entre los instrumentos invitados: flauta de hinos, trompeta, mandolina, vibrafono, congas, arpa y violoncelo, entre otros. Además del Theremin, el primer instrumento electrónico que diversas bandas está utilizando, donde aquí ayuda a dar mayor emoción a los temas.
Y la sensibilidad que desarrollan en su música. El mejor aspecto de este conjunto liderado por Rodrigo Latorre es cuando se dedican a contar canciones. Historias de gente común y corriente envueltas en la inmensidad de la ciudad, tal como la “Balada del Hombre Invisible”, protagonista que termina su recorrido encontrándose con un niño que finalmente lo puede ver. Ese que se encuentra cuando la música se detiene y la voz da el desenlace.
El trabajo tiene varias tonalidades y velocidades. Pasando por casi todos los estilos, dando muestras de la calidad de los músicos integrantes de la banda. Un disco que anda al máximo en el single “Café Turco” y se suaviza en “Canción de Cuna”. Una mezcla en la que aparecen Cha Cha Cha, un guitarrón chileno que dedica décimas al bicentenario y todos los estilos que convierten a “Radio Galena” en un álbum sumamente variado. Para sentarse poner play y revivir el mundo de antaño.
Mención aparte se merece el diseño del disco. Realizado por Claudio Botarro (ex integrante de Poema Arcanus), vale realmente la pena comprar el álbum. Viene envuelto en una caja de la cual se extrae un digipack con un booklet de 32 páginas y todo a color. Realmente destacable el trabajo que hay detrás de la edición.